Como gerente de mantenimiento de activos, tu rol es crucial para asegurar que todos los equipos y sistemas funcionen de manera óptima. Este nivel de responsabilidad puede ser estresante, por lo que es vital cuidar tu salud mental. La salud mental se refiere a tu bienestar psicológico general, incluyendo cómo te sientes contigo mismo, la calidad de tus relaciones y tu capacidad para manejar tus sentimientos y el estrés de la vida diaria. Todo esto influye directamente en tu productividad laboral y en la eficiencia de tu gestión.
Sugerencias para Mejorar tu Salud Mental y tu Gestión:
1. Replantea tus Pensamientos Inútiles o Tóxicos
La forma en que piensas, sientes y te comportas están estrechamente vinculadas. Preocuparte o enredarte en pensamientos negativos no favorece tu bienestar ni tu desempeño. Enfocarte en lo positivo te ayudará a sentirte más relajado y enfocado, lo cual es esencial para tomar decisiones acertadas en la gestión de mantenimiento.
2. Mantente Activo
Mantenerse activo es beneficioso tanto para el cerebro como para el cuerpo. El ejercicio regular puede tener un gran impacto en tu salud mental y emocional, aliviar el estrés, mejorar la memoria e incluso ayudarte a dormir mejor. No necesitas ir al gimnasio; una buena caminata o cualquier actividad física que disfrutes contribuirá a tu bienestar.
3. Come una Dieta Saludable
Los alimentos que mejoran nuestro estado de ánimo incluyen pescado graso rico en omega-3, nueces, aguacates, frijoles, verduras de hoja verde y frutas frescas. También, de vez en cuando, date un gusto con algo que te encante. Esto te subirá el ánimo y te dará energía para enfrentar tus responsabilidades.
4. Encuentra Propósito y Significado en tu Trabajo
Como gerente de mantenimiento, tu trabajo tiene un gran impacto en la operatividad y seguridad de tu empresa. Encuentra satisfacción en saber que tus esfuerzos contribuyen al éxito general. Participa en actividades que te hagan sentir útil y pasa tiempo de calidad con tus colegas y seres queridos.
5. Vive el Presente
Podemos obtener una mejor perspectiva si nos tomamos el tiempo para ser conscientes de nosotros mismos y estar presentes en el momento. Esto significa estar atento a tus propios pensamientos y sentimientos, así como al entorno que te rodea, lo cual puede ayudarte a gestionar mejor las situaciones estresantes.
6. Practica la Gratitud
Está comprobado que vivir en gratitud reduce la presión arterial, la ansiedad y la depresión. Tu sistema inmunológico se fortalece, y logras mayor optimismo, felicidad y fuerza mental. Practicar la gratitud puede ayudarte a ver tu vida y tu trabajo de manera diferente, elevando tus niveles de energía y productividad.
7. Duerme Bien
Un sueño de buena calidad marca una gran diferencia en cómo nos sentimos mental y físicamente. Es importante dormir lo suficiente. No se trata solo de cuántas horas duermes, sino de la calidad de ese descanso, lo cual es fundamental para tomar decisiones claras y efectivas.
8. Mantén un Aprendizaje Constante
Las circunstancias actuales requieren que desarrollemos habilidades superiores que nos permitan afrontar los cambios con agilidad emocional. Incrementar la confianza en tus capacidades, orientarte hacia el aprendizaje continuo y la mejora constante son claves para estar al nivel de los nuevos retos en la gestión de mantenimiento.